3 Ventajas de ser una autora tortuga

Si recuerdas la fábula de la tortuga y la liebre, ya sabes de qué va este post. Si no… refréscala en google y luego sigue leyendo este post.

 

 

El trabajo de las escritoras va cada vez a más velocidad. No basta con que escribas una novela al año. El mercado, la demanda, la competencia, la necesidad de ganar dinero, el éxito, la inmediatez de las redes sociales… Todo esto añadido a tus propias exigencias te lleva a querer/necesitar resultados a toda velocidad.

 

Las prisas nunca son buenas. Para la escritura, tampoco. Así es que empieza ya por asumir que cuanto más despacio vayas en esta profesión, mejor te va a ir. ¡Ojo!, he dicho despacio, algo que no tiene nada que ver con alargar las cosas eternamente, no marcarse objetivos o plazos o, simplemente, no tener un plan de acción.

 

Por eso te voy a hablar de los tres principales beneficios que tiene ser una autora tortuga.

 

1.     Escribir una novela sólida, coherente y sin carencias.

Planificar, escribir poco a poco, tomarte tu tiempo para reflexionar escenas, diálogos, reacciones de los personajes o ubicar a la perfección una escena mediante una buena descripción va a proporcionar a tu obra una mayor calidad. Además, avanzar en la escritura a poca velocidad también te va a ayudar a ser más consciente de tus errores al construir la historia, te va a mostrar tus puntos débiles y que debes trabajar más, al tiempo que te permitirá crear una estructura narrativa mucho más sólida.

 

2.     Ahorrar tiempo

Cuantas más horas inviertas en la escritura de tu novela, menos tiempo emplearás después en releerla y corregirla. Eso es un hecho. Es mucho más fácil cometer errores si te marcas un ritmo de escritura de cuatro mil quinientas palabras al día, que si tu meta es ochocientas. Vas a estar mucho más fresca, centrada y metida en la trama de tu novela con un objetivo diario más bajo y asumible.

 

3.     Madurar como escritora

Elaborar un calendario de escritura a largo plazo y establecer fechas de publicación de tus novelas a cinco años vista te va a permitir algo fundamental: Crecer como escritora. ¿Cómo es esto posible? Mientras ordenas tus novelas, gestionas tu horario de trabajo y planificas tus días de escritura aprendes más sobre tus límites a la hora de crear tus historias. También descubrirás como poco a poco cumples objetivos pequeños y puedes ir asumiendo otros mayores.

Como verás, ser autora tortuga es mucho más interesante de lo que pensabas. Y si quieres probar el método con la escritura de tu próxima novela, te invito a que lo hagas en mi compañía haz click AQUÍ y hablamos.